La falta de limpieza frecuente en una casa no solo es sinónimo de pereza, sino que este comportamiento para la psicología puede revelar algo mucho más profundo. Muchas veces puede estar relacionado al estado emocional.
De acuerdo a distintos estudios, el orden y la limpieza del hogar suelen estar vinculados a la organización mental . Por eso, un ambiente desordenado o sucio puede ser el reflejo de estrés, ansiedad, tristeza o falta de motivación .
Cuando alguien deja de limpiar con frecuencia, muchas veces manifiesta una sobrecarga emocional o incluso un cuadro depresivo.
Además, no ocuparse de la limpieza no siempre es desinterés. En algunos casos, es un síntoma de cansancio extremo , ya que la persona prioriza otras actividades o directamente no tiene energía suficiente pa