Bruselas.— En el puerto de Flesinga , en donde empieza la costa de Países Bajos en dirección al norte, la aduana encontró el pasado 4 de junio mil 102 kilogramos de cocaína mientras realizaban un control habitual.
La droga, con un valor en el mercado superior a los 27 millones de euros, estaba oculta en un cargamento de fruta procedente de Ecuador y tenía como destino final una empresa europea.
El hallazgo habría sido clasificado hace un par de años por el Ministerio del Interior de Holanda como excepcional, al tratarse de un puerto de bajo perfil y ubicado en una de las esquinas del país.
En la actualidad, este tipo de incidentes ha dejado de asombrar a las fuerzas del orden debido a que forma parte de un patrón en expansión y que consiste en el uso cada vez mayor d