Tras el multitudinario desfile de carrozas, que congregó a numeroso público a lo largo de todo el recorrido, la música tomó el testigo y se convirtió en la auténtica protagonista de la noche en el segundo día de la Feria y Fiestas de San Julián.

Y es que la Carpa Joven abría sus puertas en el recinto ferial al talento musical conquense, con grupos locales, que no dudaron en echar el resto en este escenario. El grupo de rock Inspector Harry fue el encargado de romper el hielo e inaugurar este espacio, que sirvió de antesala para las actuaciones de Dzero, con su tributo a El Canto del Loco, y la música de DJ Brother.

El Parque Santa Ana, por otro lado, volvía a acoger las tradicionales verbenas, después de bastantes años sin poder disfrutarlas. Público asistente a uno de las actuaciones

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