Las pepas son esas galletitas que muchos recordamos de la infancia, con su centro relleno de dulce de leche o las clásicas con membrillo que acompaña a la perfección un mate, un café o un vaso de leche. Su sabor casero, suave y tierno, las convierte en un clásico que nunca pasa de moda y que se disfruta en familia en cualquier momento del día. Prepararlas en casa no solo es sencillo, sino también una forma de revivir recuerdos y crear nuevos momentos compartidos alrededor de la mesa.

Lo mejor de esta receta es que no requiere de técnicas complicadas ni de ingredientes difíciles de conseguir. Con pocos elementos básicos, en menos de media hora podés tener listas unas galletas irresistibles que seguro van a volar del plato. Además, es una preparación ideal para animarse a la cocina y hast

See Full Page