El salvadoreño Kilmar Abrego García, denunció que la administración de Donald Trump utilizó la amenaza de deportarlo a Uganda como mecanismo de presión para que se declarara culpable.
El extranjero, quien permaneció casi tres meses detenido en El Salvador tras ser enviado a ese país por error y posteriormente trasladado de regreso a Estados Unidos, quedó en libertad el viernes.
Según documentos judiciales presentados este sábado, los abogados de Ábrego sostienen que el Departamento de Justicia le ofreció un acuerdo. Admitir culpabilidad por tráfico de personas y enfrentar un proceso de deportación, a cambio de enviarlo a Costa Rica, donde podría residir sin riesgo de ser devuelto a El Salvador.
Incluso, aseguran que el gobierno entregó una carta en la que se garantizaba que ese pa