La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ordenó la suspensión inmediata y cese de actividades de explotación minera en dos predios ubicados en el municipio de Sasaima , donde se desarrollaba esta labor de manera ilegal, sin contar con permisos ni licencia ambiental.
Durante una visita técnica por el equipo de la Dirección Regional Gualivá , se evidenció la operación de maquinaria amarilla, incluyendo una retroexcavadora. Además, se determinó que la zona afectada es de 1.900 m2 y se estima que se removieron aproximadamente 38.000 m3 de recebo y material para construcción.
Esta intervención al recurso suelo amenazó los ecosistemas y recursos naturales de esta parte de la región, alterando significativamente el paisaje y el equilibrio ecológico del área. “En actuacion