Los números de la economía real son cada vez más crudos. A la constante pérdida del poder adquisitivo, el consumo que se mueve de forma demasiado despareja y discriminando por sector, y una tasa de desempleo que viene mostrando una evolución negativa en los últimos meses , ahora se conoció otra variable que también suma preocupación.
La morosidad en el pago de créditos ya suma en el año seis meses de crecimiento constante, una muestra significativa respecto de la complejidad financiera, y una situación que se repite tanto en los segmentos "familia" como "sector privado". En ambos casos, además, en junio pasado -el último mes relevado por el Banco Central (BCRA) se marcó la cifra más alta del primer semestre de 2025.
Si bien la situación es dura en ambos casos, la realidad muestra que