El regreso del Real Oviedo a Primera División, , estaba cargado de expectación. El ambiente fue ensordecedor desde el pitido inicial y, entre los protagonistas, había uno al que se miraba con lupa: Vinícius Júnior. El brasileño, que por primera vez pisaba el estadio asturiano, , decisión de Xabi Alonso que dio protagonismo inicial a Rodrygo y Mastantuono en las bandas.
En el minuto 63, Xabi Alonso decidió mover fichas. Retiró a Rodrygo y a Mastantuono , agotados tras un despliegue generoso, y dio entrada a Vinícius y Brahim . El cambio alteró la dinámica. El brasileño entró al campo con ímpetu, participando pronto en los ataques y atrayendo la atención inmediata de la grada, que lo recibió con una sonora pitada. No había margen para la indiferencia: su sola presencia ya