El juez federal Sebastián Casanello ordenó citar a indagatoria a Ariel De Vicentis, a cargo del área de seguridad del barrio privado Nordelta, tras sospechar que habría advertido al empresario investigado Jonathan Kovalivker sobre la proximidad del operativo policial.
La investigación fue impulsada por el fiscal Franco Picardi, quien consideró que el supuesto aviso configura un intento de obstrucción de la Justicia. "El mensaje es claro: no se va a tolerar la obstrucción de la Justicia", afirmaron fuentes vinculadas a la causa.
El episodio se desencadenó cuando la Policía de la Ciudad, bajo fuerte presión debido a antecedentes similares en esa zona, citando expresamente el fallido intento de fuga del financista Elías Piccirillo, se presentó en una de las garitas para obtener información