Los grupos armados organizados en Colombia ya tienen armas más modernas y sofisticadas que las que tiene el Ejército
Con cada día que pasa, con cada mes que pasa, Colombia se acerca inexorablemente a perder la guerra contra el narcotráfico. Algunos dirán que ya está perdida, pero la verdad es que aún nos quedan unos mínimos chances para intentarlo. Todo es cuestión de tiempo y ese es el problema: tiempo no hay.
El atentado terrorista de la semana pasada en Cali y la muerte en Antioquia de los policías que se movilizaban en el helicóptero que cayó por el presunto impacto de un dron, dicen mucho más de lo que señalan los titulares.
Por un lado, el atentado contra la base de la Fuerza Aérea Marco Fidel Suárez evidencia, una vez más, que resulta inconveniente tener una base militar – la qu