La ola de incendios que sufre Galicia, sobre todo desde que el 8 de agosto se inició el megafuego de Chandrexa de Queixa y Vilariño de Conso, ha adquirido proporciones históricas. Según los datos proporcionados por la Xunta, desde el 1 de julio hasta este 25 de agosto, con todavía siete focos activos, han ardido algo más de 94.400 hectáreas.
Pero las imágenes del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (Effis, siglas en inglés), integrado en el programa de satélites Copernicus, aumentan la superficie afectada hasta las 163.554 ha. Es un 57,7% más de lo reconocido por el Gobierno gallego , una diferencia que el día 20, antes de que la Consellería de Medio Rural incrementase de golpe en miles de hectáreas su cálculo, era de más del 100%.
La estimación de Medio