El pasado viernes a las nueve de la noche, el docente Guillermo Ibáñez, dueño de un perro llamado Torres, estaba alistando su camioneta blanca TXL frente a su casa, ubicada en el barrio Galán, para salir de viaje. El colegio El Sorrento se encontraba justo al frente de su residencia.
Guillermo había metido a su perro dentro de la camioneta y se despedía de una niña cuando fue sorprendido por cinco o seis individuos armados con revólveres niquelados.
Los delincuentes, que brillaban en la oscuridad, le apuntaron directamente al pecho a Guillermo y amenazaron con dispararles a su esposa, a su cuñado y a la niña. Amedrentado, Guillermo no tuvo más opción que entregarles el control del vehículo. Los asaltantes se subieron a la camioneta y se la llevaron a toda velocidad. Desesperado, Gu