Imaginemos por un momento que nuestro intestino es como un enorme jardín lleno de vida, cuidado por millones de bacterias que ofician de jardineros, trabajando juntas para mantenerte sano. Esas bacterias, conocidas como microbiota intestinal, ayudan a digerir alimentos, fortalecen tu sistema inmune y hasta pueden influir en tu estado de ánimo .

Ahora bien: ¿qué pasa cuando este “jardín” recibe un "veneno" en forma de comida? La dieta occidental, cargada de azúcares, grasas procesadas y pocos nutrientes, está siendo señalada por expertos como una amenaza para este ecosistema vital. Los científicos advierten que lo que comemos no solo afecta nuestro peso o energía, sino que puede desequilibrar este delicado jardín intestinal, volviéndolo menos diverso y más débil.

Estudios recientes mue

See Full Page