Con una lluvia torrencial sobre sus cabezas, con más de 450 millones sobre el campo y ante un Cuarta división, el Manchester United completó uno de los mayores bochornos de su historia. El conjunto de Rúben Amorim cayó en los penaltis -después de que al final del encuentro se llegase con empate a dos- ante el Grimsby Town, de League Two, y se queda fuera de la Copa de la Liga.
Entre cánticos dirigidos a Amorim de «Te van a despedir por la mañana» y el sarcástico: «¿Podemos jugar contra vosotros cada semana?», el Grimsby, que llegó a ir 2-0 en el minuto 75, dio la gran sorpresa de esta segunda ronda de la Copa de la Liga -que el United tiene que jugar por no meterse en Europa el curso pasado- tras una tanda con 26 lanzamientos y el fallo final de Bryan Mbeumo.
Y no, no fue porque el Unite