Alemania ha aprobado un proyecto de ley para reintroducir un servicio militar voluntario que podría convertirse en obligatorio si las circunstancias lo requieren, principalmente motivado por la creciente amenaza rusa.
El objetivo es aumentar el número de soldados activos de los actuales 180.000 a 260.000 y duplicar los reservistas hasta 200.000. El plan contempla un proceso de reclutamiento que empezará con 15.000 nuevos voluntarios en 2026, quienes recibirán una remuneración cercana a los 2.000 euros netos al mes y tendrán cobertura total del seguro médico.
Aunque el servicio será inicialmente voluntario, la ley incluye la posibilidad de hacerlo obligatorio con la aprobación del Parlamento alemán (Bundestag) si no se cumplen los objetivos de reclutamiento o si la situación de segurida