El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dejado claro que no tiene intención de convocar elecciones anticipadas, incluso si el Congreso rechaza el proyecto de Presupuestos para 2026. En una reciente entrevista, Sánchez afirmó: "Vamos a pelear para aprobarlo y si no, seguiremos con los de 2023". Esta declaración marca un cambio significativo en su postura, ya que anteriormente había insinuado la posibilidad de dimitir en caso de que surgieran problemas graves.

Sánchez se comprometió a llevar el proyecto de Presupuestos a la Cámara baja, destacando que las cuentas públicas son un medio para alcanzar objetivos como el crecimiento económico, la creación de empleo y la reducción de la desigualdad. Aseguró que su agenda de transformación y la ejecución de los fondos europeos son prioridades, subrayando que España dejará de recibir estos fondos en 2026.

A pesar de enfrentar un año complicado, marcado por causas judiciales que afectan a su entorno político y familiar, Sánchez se muestra decidido a agotar la legislatura. En relación a las imputaciones de exdirigentes del PSOE, como José Luis Ábalos y Santos Cerdán, el presidente ha negado la existencia de financiación irregular en su partido y ha afirmado que ya ha asumido todas las responsabilidades políticas.

Sánchez también expresó su confianza en la Justicia, aunque reconoció que hay excepciones. "Hay jueces haciendo política y políticos que intentan hacer justicia", afirmó, refiriéndose a casos específicos que involucran a su familia y a miembros de su partido. A pesar de la presión, el presidente se mantiene firme en su posición y asegura que no dimitirá, incluso si se producen condenas en los casos mencionados.