La jornada financiera estuvo marcada por la incertidumbre electoral, a pesar del feriado en Estados Unidos por el "Labor Day", que normalmente implica movimientos limitados en el mercado local. El volumen del mercado mayorista alcanzó los 340 millones de dólares, con cotizaciones al alza en todos los segmentos. Sin embargo, los inversores mostraron desconfianza ante el clima político, lo que provocó caídas en bonos y acciones, sin la referencia de Wall Street.

El dólar experimentó un aumento superior al 2%, alcanzando los 1.372 pesos en el mercado mayorista. En la pantalla del Banco Nación, el dólar llegó a tocar los 1.390 pesos y cerró en 1.385, lo que representa un incremento de 25 pesos respecto al cierre del viernes, marcando su nivel más alto desde la eliminación del cepo en abril. El dólar blue también subió, alcanzando los 1.355 pesos.

En el primer día de septiembre, el dólar continuó su ascenso y se perfila para acercarse al techo de la banda cambiaria, que es de 1.470 pesos, a menos que se implementen nuevas medidas oficiales. La suba del dólar se mantuvo con una tasa de interés para depósitos mayoristas (Tamar) superior al 66%. Las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) aumentaron en 64 millones de dólares, totalizando 40.030 millones de dólares.

El índice S&P Merval sufrió la presión política, cerrando con una caída del 2,3% en pesos y del 4,8% en dólares. En lo que va del año, las pérdidas acumuladas son del 23,4% y 34,7%, respectivamente. Según un informe del Grupo SBS, "los bonos en dólares no tuvieron su referencia externa y cerraron en BYMA con caídas de casi 2%. Los bonos reales, por su parte, se mostraron más defensivos, retrocediendo un 0,15% en promedio."

El clima político se complica con denuncias de supuestas irregularidades en la Agencia Nacional de Discapacidad, lo que afecta al Gobierno, y la inminente elección en la provincia de Buenos Aires. Además, el resultado de las elecciones en Corrientes, donde La Libertad Avanza obtuvo un bajo cuarto puesto, añade más presión. Nicolás Capella, de IEB, comentó: "Si bien mañana veremos realmente el impacto del revés electoral de Corrientes, la realidad es que no se arrancó la semana de la mejor manera posible."

El Ministerio de Economía ha registrado en las últimas semanas una pérdida de más de 130 millones de dólares en las tenencias del Tesoro, que se habrían destinado a ventas directas. Esto ha generado un clima de incertidumbre entre los operadores, quienes están cada vez más atentos a los resultados de las elecciones bonaerenses, que son consideradas un preludio de las elecciones nacionales del 26 de octubre.

José María Segura, de PwC Argentina, advirtió: "Si el resultado no ofrece señales claras de respaldo político, la incertidumbre podría intensificarse, prolongándose por un mes más, hasta octubre."

Un informe de Cohen destacó que "con la economía tensionada por la volatilidad cambiaria y de tasas, el foco de los inversores se traslada a las elecciones en la provincia de Buenos Aires tras el revés de la LLA en Corrientes." Mientras persista esta incertidumbre, el mercado espera más medidas que contengan el dólar y los precios hasta el momento de votar, ya que la baja de la inflación es el principal argumento del oficialismo para captar votos.

De aquí a octubre, la administración parece dispuesta a tolerar un menor nivel de actividad a cambio de reforzar el control sobre el dólar y la inflación. El rumbo de la política cambiaria y monetaria dependerá del resultado electoral, y en caso de una victoria oficialista amplia, se intentará mantener un tipo de cambio estable, aunque se prevé que el esquema monetario-cambiario requerirá un ajuste moderado.