Rusia y China dieron su aprobación al proyecto del gasoducto “Power of Siberia 2”, sin embargo, aún no establecieron un acuerdo sobre el precio del ambicioso proyecto, así lo informó este martes la mayor empresa de gas rusa, Gazprom, lo que pone de relieve el desdén del presidente Xi Jinping frente a las demandas occidentales de que se aleje de una asociación más estrecha con Moscú.
El ducto, que en el futuro podría suministrar 50 mil millones de metros cúbicos (bcm) adicionales de gas por año a China a través de Mongolia desde los yacimientos árticos de Yamal, ofrece al mayor consumidor de energía del mundo más opciones para reducir su dependencia futura del gas natural licuado (GNL) de Estados Unidos.
El anuncio del director ejecutivo de Gazprom, Alexéi Miller, sobre un “memorando lega