Un juez federal ha bloqueado la orden del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que buscaba poner fin al Estatus de Protección Temporal (TPS) para más de un millón de inmigrantes de Venezuela y Haití. La decisión fue emitida por el juez Edward Chen del Tribunal de Distrito Norte de California, quien determinó que la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, había excedido su autoridad al intentar cancelar el TPS, calificando su acción de «arbitraria y caprichosa».
Este fallo beneficia a aproximadamente 600,000 venezolanos y 500,000 haitianos que dependen de este estatus para vivir y trabajar legalmente en el país. La protección del TPS había sido otorgada por la administración del expresidente Joe Biden en 2021 y extendida en 2023. La decisión del juez Chen asegura que los beneficiarios del TPS mantendrán su estatus legal y su permiso de trabajo, evitando así la deportación.
La acción judicial representa una victoria significativa para la Alianza Nacional TPS y para los inmigrantes que habían interpuesto la demanda. El juez Chen, en su fallo de 69 páginas, argumentó que la terminación del TPS no solo era injustificada, sino que también ponía en riesgo a cientos de miles de personas.
Adelys Ferro, directora del Venezuelan American Caucus, celebró la decisión, afirmando que "ganamos la batalla" y que todos los venezolanos están protegidos. Ferro destacó que el fallo restituye el TPS hasta octubre de 2026, lo que significa que los beneficiarios podrán permanecer en Estados Unidos sin temor a ser separados de sus familias.
Se espera que el gobierno de Trump apele esta decisión, lo que podría llevar el caso hasta el Tribunal Supremo. Mientras tanto, más de un millón de personas, incluidos cientos de miles de venezolanos, podrán continuar viviendo legalmente en Estados Unidos.