El ataque masivo de Rusia contra Ucrania en la madrugada del domingo marcó un nuevo récord en el uso de drones y misiles, alcanzando por primera vez la sede del Gobierno en Kiev y dejando al menos dos personas muertas, entre ellas un recién nacido. Este episodio, considerado el más grave desde el inicio de la guerra en febrero de 2022, ha provocado una ola de condenas internacionales y renovados llamados a endurecer las sanciones a Rusia y reforzar el apoyo militar a Ucrania.
La magnitud del ataque y el hecho de que la sede del Gobierno haya sido alcanzada por primera vez generaron una fuerte reacción internacional. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen , denunció que “el Kremlin se burla de la diplomacia , pisotea el derecho internacional y mata