El detenido por el crimen de la turista francesa que viajaba sola en autocaravana en Castellón ha sido entregado a la justicia española
La pista que llevó a los investigadores a dar con el principal sospechoso del crimen de Sonia Dzouz, la turista francesa de 63 años que murió brutalmente acuchillada el pasado verano mientras se encontraba de vacaciones con su caravana en Alcossebre (7.176 habitantes, Castellón), tardó un tiempo en llegar. Y no fue porque se pasara por alto en las primeras indagaciones, sino porque todavía no se había producido, según explican fuentes conocedoras de la investigación. Meses después de aquel crimen, ocurrido el 18 de julio de 2024, un hermano de Christian Moliner, de 48 años, denunció su desaparición y aseguró que el último día que habían tenido noticias