Día tras día crecen las alertas de los sectores de transporte de carga por carretera en torno a la difícil situación que vienen enfrentando, sobre todo en los últimos meses, debido a los actos de violencia contra los conductores y vehículos tipo camión, furgón o tractomula. Cada vez son más recurrentes los ataques terroristas en donde los ilegales bloquean el paso de los automotores, los saquean o incendian.
Según voceros del sector, el pico de violencia tiene varios móviles. Por un lado, los hostigamientos al transporte de carga hacen parte de las presiones que ejercen grupos de delincuencia común y organizada sobre las empresas y los conductores para el pago de extorsiones. En otros casos, los incendios de los vehículos, o incluso cuando terminan atravesados en las carreteras y cargados