El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) fue alertado sobre la existencia de una refinería ilegal en el sur de Veracruz desde hace más de cinco años, específicamente en enero de 2020. A pesar de los reportes de inteligencia militar que señalaban su ubicación y la vinculación con el grupo criminal “La Barredora” y un exfuncionario cercano, la planta operó impunemente hasta su reciente desmantelamiento. Este caso, destapado por la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), plantea serias dudas sobre la efectividad de la estrategia contra el robo de combustible, conocido como huachicol.
Según la investigación de MCCI, informes de inteligencia militar del 8 de enero de 2020 alertaban sobre una planta clandestina en los límites de Veracruz y Tabasco