No es el tumor ginecológico más frecuente pero, sin pruebas de detección precoz ni síntomas específicos, en muchas ocasiones se diagnostica tarde. La investigación y la medicina de precisión buscan cambiar su pronóstico
Silencioso, traicionero y muchas veces invisible por la dificultad del diagnóstico. Así se presenta el cáncer de ovario, el tumor ginecológico más letal en España. No hay programas de cribado, los síntomas son inespecíficos y el diagnóstico, con frecuencia, llega cuando la enfermedad ya está avanzada. Sin embargo, los avances en cirugía, quimioterapia y medicina personalizada están abriendo una nueva ventana de esperanza para las pacientes.
En 2025, unas 3.700 mujeres serán diagnosticadas de cáncer de ovario en España, siendo la principal causa de muerte por cáncer gineco