Polonia, un socio clave en el flanco oriental de la OTAN, no ha esperado a que Estados Unidos complete su despliegue interno para mover ficha. El país se ha convertido en el primer cliente internacional del nuevo radar de defensa antimisiles LTAMDS al cerrar un pedido para la adquisición de doce de estas avanzadas unidades, un movimiento que demuestra la enorme confianza que suscita esta tecnología más allá de las fronteras norteamericanas.
De hecho, este interés se centra en la que es la principal baza del nuevo sensor: su capacidad para proporcionar una defensa integrada de 360 grados . A diferencia del sistema al que sustituye, el LTAMDS elimina por completo los puntos ciegos, lo que le permite hacer frente a amenazas complejas y simultáneas desde cualquier dirección. Esta cualidad