Una de las mayores granjas porcícolas de Yucatán fue clausurada este martes de forma total y definitiva por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
El cierre de las instalaciones de la empresa Pecuaria Peninsular en Santa María Chi -una localidad del municipio de Mérida-, explicó, obedece a la descarga directa de sus aguas residuales sin permiso y la omisión en la caracterización de sus lodos, así como al incumplimiento reiterado de medidas correctivas.
De acuerdo con Wilberth Nahuat, comisario de la comunidad maya, la granja constaba en abril de 72 naves y tenía un inventario aproximado de 60 mil cerdos.
Se trata de un caso muy importante de justicia ambiental, señaló en un video la titular de la Profepa, Mariana Boy.
"Este caso es fundamental para la Profepa. Con