Una gran cantidad de pueblos catalanes cuentan con una población muy reducida, lo que se conoce como la Cataluña vaciada. En estos municipios, todos los vecinos se conocen, y la pérdida de cualquiera de ellos es una noticia devastadora.
En Port de la Selva, un pequeño pueblo de Girona, un matrimonio vecino ha fallecido recientemente , lo que ha provocado el luto de todo el municipio. La pareja era muy conocida en el pueblo, y más allá del dolor personal por la pérdida de ambos, también ha supuesto una pérdida muy grande a nivel profesional.
Este matrimonio era el dueño del 20% de toda la oferta gastronómica del pueblo. Este hecho ha provocado que su muerte deje a más de 100 personas sin trabajo en plena temporada alta . A pesar de que los restaurantes y los bares, según cuenta Anten