Jessica González, puertorriqueña que vive en Florida, procura que su hijo Travis realice actividades recreativas para su desarrollo integral. Foto por Gerardo Mora | Centro de Periodismo Investigativo (Gerardo Mora)

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Del CPI .

Cuando su hijo Travis fue diagnosticado con síndrome de Down en 2009, Jessica González, entonces con 21 años, supo que su vida estaría marcada por una búsqueda constante de apoyos tanto educativos como terapéuticos y extracurriculares.

Poco después de que Travis cumpliera 5 años, González y su esposo vendieron todo en Puerto Rico y se mudaron a San Antonio, Texas, con la esperanza de que el sistema educativo y de salud estadounidense le ofreciera, a su hijo, los servicios que necesitaba.

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La decisión no fue al azar. González creció co

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