Con mucho viento a favor después del demoledor resultado electoral en Buenos Aires, la oposición encara la sesión del próximo miércoles 17 de septiembre con un halo de optimismo, y empieza a construir la mayoría de dos tercios para tumbar los vetos a las leyes de financiamiento universitario y emergencia de la salud pediátrica.
Las turbulencias en el plano económico, los escandalosos casos de corrupción que salpican a los hermanos Milei, la política hacia los jubilados y discapacitados, derrotas fulminantes en el Congreso, las salvajes peleas internas a cielo abierto, el maltrato a los aliados y, como frutilla del postre, la paliza en el principal distrito del país, generaron un clima muy turbio, un humor social cada vez más hostil hacia el Gobierno que contagia a los actores políticos