Cada septiembre, cuando los días se alargan y la primavera comienza a asomarse entre las últimas lluvias, Chile entero se prepara para celebrar su fiesta más profunda: las Fiestas Patrias. El 18 de septiembre no es simplemente un feriado ni un motivo de descanso; es, más bien, la memoria viva de un pueblo que, pese a las diferencias, se reconoce en la bandera, en el himno y en los gestos sencillos que compartimos alrededor de una ramada, un asado o una cueca improvisada.

Lo curioso es que, en estricto rigor histórico, el 18 de septiembre de 1810 no fue la independencia formal de Chile. Ese día se constituyó la Primera Junta Nacional de Gobierno, que abrió el camino hacia la emancipación definitiva. La independencia fue proclamada oficialmente años más tarde, en 1818, pero la Junta de 1810

See Full Page