Viernes 12 de septiembre. Cae la tarde en Mataró, capital de la comarca del Maresme, a unos treinta kilómetros de Barcelona, tradicionalmente un centro administrativo de dinamismo económico. Históricamente uno de los núcleos urbanos de la revolución industrial en Cataluña gracias a la manufactura textil del género de punto y la metalurgia. Epicentro del tejido productivo textil, metalúrgico y de servicios, aquí se concentran las más importantes empresas del sector.

Un grupo de sus máximos responsables quedan a cenar y celebran el fracaso de la reducción de la jornada laboral, la medida estrella de la ministra de Trabajo, que acaba de ser rechazada en el Congreso con un sonoro fracaso de la comunista lideresa de Sumar.

La portavoz de JuntsxCat, Míriam Nogueras, conoce muy bien el tema, pu

See Full Page