
El hallazgo de una bomba sin detonar de la Segunda Guerra Mundial ha provocado la evacuación urgente de más de 6.000 personas en el distrito de Quarry Bay , en la costa oriental de Hong Kong , durante la madrugada del sábado. El artefacto, de 1,5 metros de longitud y más de 450 kilos de peso , fue identificado como una bomba estadounidense cargada con 500 libras de TNT .
El explosivo fue descubierto por trabajadores de la construcción durante unas excavaciones rutinarias en la calle Pan Hoi , entre los números 16 y 94. Tras la alerta inicial, las autoridades activaron un plan de emergencia de evacuación sin precedentes en la zona, obligando a 1.900 hogares a abandonar sus residencias entre las 2:00 y las 11:48 de la mañana.
Un artefacto de alta potencia en condiciones “casi intactas”
Según declaraciones del agente jefe Andy Chan Tin-Chu , responsable del operativo, la bomba se encontraba “en un estado sorprendentemente bien conservado” y representaba “ una amenaza real y significativa para la población ”. Por ello, el equipo especializado en explosivos ( EOD , por sus siglas en inglés) decidió activar el protocolo de desactivación más exhaustivo.
“Dada la cantidad de explosivo activo y la proximidad a zonas densamente pobladas, se optó por una evacuación total del perímetro , priorizando en todo momento la seguridad pública ”, afirmó el portavoz policial en rueda de prensa.
Los trabajos de neutralización se prolongaron durante casi diez horas , bajo condiciones climáticas adversas causadas por un tifón en la región.
Desactivación bajo el tifón: 10 horas de tensión y precisión
Los técnicos en desactivación de artefactos explosivos trabajaron sin interrupción entre la madrugada y el mediodía del sábado. Equipados con trajes especiales, escáneres y dispositivos de precisión, lograron neutralizar la bomba a las 11:48 a. m. , sin que se produjeran heridos ni daños materiales.
La Policía de Hong Kong ha destacado que la operación se llevó a cabo con precisión quirúrgica , a pesar de que los trabajos se desarrollaron “ bajo condiciones meteorológicas extremas ”.
Un hallazgo no aislado: Hong Kong y su herencia bélica enterrada
No es la primera vez que se localiza un explosivo de la Segunda Guerra Mundial en la antigua colonia británica. En 2018, tres bombas similares fueron halladas y desactivadas en el distrito financiero de Central , todas de origen estadounidense y arrojadas durante los ataques aéreos contra la ocupación japonesa entre 1941 y 1945.
La ciudad de Hong Kong, ocupada por el Ejército Imperial Japonés durante gran parte de la guerra, fue objeto de intensos bombardeos aliados , lo que explica la presencia de numerosos artefactos sin detonar aún enterrados bajo su tejido urbano.
El hallazgo en Quarry Bay ha reabierto el debate sobre los riesgos asociados al crecimiento urbano sobre antiguos campos de batalla . Las autoridades hongkonesas han reiterado su compromiso con la detección preventiva de explosivos en zonas de desarrollo urbano intensivo.
Este episodio es, además, un símbolo inquietante de la persistencia de las heridas históricas , que aún se manifiestan de forma literal bajo tierra, en forma de artefactos letales latentes que emergen inesperadamente en plena era digital.