La disminución del deseo sexual , más conocida como pérdida de libido , afecta a uno de cada cinco hombres y a un número aún mayor de mujeres en algún momento de su vida, según datos del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido.
De acuerdo con los expertos, estas afecciones son multifactoriales y no siempre están relacionadas con un problema mayor. En ocasiones, se asocian con el estrés, cambios en el estilo de vida u otros factores.
“La salud y la calidad de la vida sexual se relacionan con las emociones, las hormonas, la circulación, la fuerza muscular y, sobre todo, con los hábitos cotidianos, como la alimentación, el ejercicio y la manera de enfrentar las situaciones del día a día”, explica el médico nutriólogo Nataniel Viuniski , miembro del Consejo Consultor de Nutrición