En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemora cada 10 de octubre, muchos expertos señalan que existe un reto crítico que muchas organizaciones aún no han priorizado: el impacto del entorno laboral en la salud mental de sus empleados. Este año, el enfoque global es claro: la salud mental debe ser una prioridad estratégica en todas las áreas de la vida, incluyendo el trabajo, donde las personas pasan una gran parte del tiempo.
Según Lina María Parada, psicóloga clínica y experta en programas de bienestar corporativo, «los factores laborales son determinantes en el bienestar psicológico de los trabajadores. Las largas jornadas, el estrés acumulado y la falta de reconocimiento son solo algunos de los elementos que pueden desencadenar problemas serios de salud mental.» En su