Los San Francisco 49ers recibieron un duro golpe a sus aspiraciones en la campaña 2025 de la NFL: su estrella defensiva, Nick Bosa, sufrió la rotura del ligamento cruzado anterior (LCA) de la rodilla derecha y tendrá que someterse a cirugía, lo que lo deja fuera por el resto de la temporada.
La lesión se produjo en el triunfo 16-15 del domingo frente a los Arizona Cardinals, cuando Bosa presionaba al mariscal de campo Kyler Murray y terminó en el suelo tras un doble bloqueo. En la caída, su rodilla derecha se dobló de manera antinatural y de inmediato encendió las alarmas en la banca de San Francisco.
Aunque las primeras pruebas no confirmaron el diagnóstico, la resonancia magnética realizada este lunes ratificó lo peor: el desgarro del ligamento cruzado. El propio entrenador Kyle Shanah