Si trabajas muchas horas y no puedes dedicar tardes enteras al estudio, lo más práctico es convertir en proyecto lo que ya haces en el trabajo o en casa. Piensa en tareas repetidas que te quitan tiempo: control de gastos del puesto, registro de horas del equipo, entradas y salidas de inventario, seguimiento de pedidos, o cálculo de propinas por turno. Cada una de estas tareas puede transformarse en un caso de análisis si guardas los datos en una hoja, defines una pregunta clara y produces un pequeño informe con un gráfico fácil de entender. El valor no está en usar herramientas raras, sino en mostrar que sabes ordenar información y tomar decisiones que ahorran minutos y dinero a personas reales.
Para escoger por dónde empezar, elige una pregunta que puedas responder en dos semanas con dat