A expensas de que algún día se conozcan otras posibles causas, lo cierto es que en estos momentos es imposible destacar un factor que explique cómo en menos de dos semanas Salvador Navarro ha perdido la presidencia de la patronal valenciana CEV que parecía tener firmemente anclada ahora y para los próximos años frente al vicepresidente y líder del metal, Vicente Lafuente . Del relato que hace los implicados y quienes les apoyan. Así que a falta de un whisky de malta hay que recurrir a un cocktail para tratar comprender un cambio insólito incluso en la agitada trayectoria de esta organización: años, ambiciones, amenazas y el cruce de la política componen el combinado.
Tal vez habría que empezar por un dato: los 14 años de Navarro al frente de la CEV : los seis primeros cuando era pro