Cultivar verduras y hortalizas no es un trabajo sencillo. Mantener las plantaciones con cuidado, evitando que puedan sufrir infecciones, o ser constante con los riegos y las condiciones necesarias implica una gran cantidad de horas de trabajo. Sin embargo, todo se ve recompensando a la hora de degustar los diferentes productos. Aunque lo cierto es que no solo el sabor termina siendo importante, sino también el aspecto físico y el tamaño.

Prueba de ello es el caso de un agricultor en Rusia que, con su calabaza, consiguió batir el récord nacional gracias a su gran tamaño. En total, la fruta (pues al tener semillas y nacer de una flor es botánicamente considerada como tal) alcanzó los 969 kg, lo que casi llega al peso de un coche. Algo nunca visto en el país y que tardó más de seis meses en

See Full Page