Rosales, Chih.- Hoy en día, la memoria está perdiéndose de todo lo que sucedió acá, en la zona que conocen como El Rebalse, donde San Lucas fue anegado por los técnicos de la Comisión Nacional de Irrigación para completar el largo proceso que llevó a la construcción de la presa Francisco I. Madero, o Las Vírgenes.
La historia duró tres siglos, y revelan hoy en día para asombrar a la gente que ignoraba estos hechos. Primero, hay que leer una placa que está colocada en Nuevo San Lucas, en el municipio de Meoqui, que conmemora la fundación de este pueblo heredero de la vieja tradición. Dice: “Nuevo San Lucas. Posiblemente fue misión de Fray Alonso de la Oliva en el siglo XVII. Para 1649 es parte de las misiones de San Pedro de Conchos, y en 1949, debido a la presa Las Vírgenes, empieza a t