“Menos mal que está Donald ”. El funcionario mileísta lo admite más con alivio que con entusiasmo . Acaso aún le pese el estrés del Gobierno de la semana pasada, con nuevos cachetazos legislativos y corrida cambiaria incluidos, hasta que la Casa Blanca entró en acción.
El fin de semana el horizonte cercano lucía más que oscuro , después de haber tenido que vender 1.000 millones de dólares para sostener su valor ante el peso en el techo de la banda de flotación administrada.
De hecho, en el medio de ese nerviosismo y de reuniones frenéticas del equipo económico, el domingo se postergó 24 horas el inicio del viaje de Javier Milei a Nueva York, sin ninguna explicación oficial.
El lunes temprano, antes de la apertura de los mercados, Economía anunció la eliminación de las retenci