Con susto, pero imparable. Así ha comenzado Carlos Alcaraz su aventura en Tokio, donde defiende el número uno del mundo logrado tras alzarse con el US Open. En su estreno en el torneo japonés, contra el argentino Sebastián Baez, el murciano se ha impuesto en dos sets para alcanzar los octavos de final. No fue fácil, puesto que encendió las alarmas al torcerse el tobillo izquierdo al comienzo del partido, pero se repuso para terminar pasando por encima de su rival. Le ganó por 6-4 y 6-2 para citarse en la siguiente ronda con Zizou Bergs o Alejandro Tabilo.
(Noticia en ampliación).