25 de septiembre de 2025.- Comenzandito el siglo XX, acorazados de varios países de Europa bloquearon las costas venezolanas exigiendo el pago de más de cientos de millones de dólares por daños causados por el Estado venezolano a connacionales europeos que vivían aquí.
Venezuela no tenía ejército, pero después de la proclama del presidente Cipriano Castro que comenzaba diciendo “La planta insolente del extranjero...” los venezolanos hicieron colas para enlistarse.
El presidente Castro hizo revisar la cuenta que nos presentaban y se concluyó que la deuda era de solo 30 millones y no de 300, como decían ellos.
Así que las cañoneras europeas levaron anclas y se devolvieron por donde habían venido.
Hoy otra vez la planta insolente mueve sus cañones por el Caribe y otra vez los venezolanos