El primer ministro israelí dice que no permitirá “el suicidio nacional” de aceptar un Estado palestino y critica la “vergüenza” de que países como Francia y el Reino Unido lo reconocieran
Un desafiante Benjamín Netanyahu clamó este viernes en el desierto de la Asamblea General de la ONU, prácticamente vacía tras abandonar la sala más de dos tercios de las delegaciones. Algunas europeas, entre ellas la española, ni siquiera habían llegado a asistir a la sesión, en una acción concertada para marcar distancias con Israel. Pero el primer ministro no pareció acusar los generalizados abucheos ni el patente desprecio de decenas de delegaciones en fuga en medio de los aplausos. Al contrario, en un tono enérgico y amenazante, aseguró que su ejército aniquilará a Hamás en Gaza y que su país “no c