
Por Itzel Chan
M ÉRIDA, MX.- La Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID 2023) muestra avances en salud sexual y reproductiva en México, pero también revelan retos significativos, sobre todo en Yucatán.
A nivel nacional, 74.5% de las mujeres en edad fértil y sexualmente activas usan anticonceptivos; sin embargo, en el grupo de adolescentes de 15 a 19 años la cifra baja a 60.2%. En Yucatán, el panorama es más complejo porque el estado mantiene una de las tasas más altas de embarazo adolescente del país, lo que refleja la falta de educación sexual integral y de acceso a métodos seguros para las y los jóvenes.
El inicio de la vida sexual en mujeres ocurre en promedio a los 18 años, etapa que coincide con la formación académica y con proyectos de vida apenas en desarrollo. En Mérida y en comunidades rurales del interior, la desinformación y el estigma alrededor de la anticoncepción agravan la vulnerabilidad de las adolescentes.
Un dato alentador es el aumento en el uso de métodos de larga duración: el implante subdérmico pasó de 6.0% en 2018 a 9.6% en 2023. No obstante, su disponibilidad sigue siendo limitada en zonas rurales e indígenas, donde persisten barreras de acceso a los servicios de salud reproductiva.
La desigualdad también se refleja en la fecundidad: en áreas urbanas, el promedio es de 1.44 hijos por mujer, mientras que en comunidades rurales asciende a 2.13 hijos. Estas diferencias exigen políticas públicas focalizadas que atiendan el rezago en salud sexual.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) advierte que más de 257 millones de mujeres en países de ingreso medio y bajo tienen una necesidad insatisfecha de anticoncepción moderna. En Yucatán, este déficit se traduce en la urgencia de fortalecer los servicios de salud sexual, en particular para adolescentes, mujeres indígenas y familias en comunidades marginadas.
Organizaciones como Organon han impulsado la campaña “Ahora es mi hora”, para visibilizar el derecho de las mujeres a decidir sobre su proyecto de vida. Pero más allá de campañas, especialistas advierten que se requiere voluntad política y social para garantizar que todas las mujeres, sin importar su edad, lugar de origen o condición económica, ejerzan plenamente su derecho a la salud sexual y reproductiva. ( Noticaribe )