El arroz es uno de los ingredientes más versátiles en la cocina mexicana y mundial. Se sirve como guarnición, plato fuerte o base de recetas más elaboradas. Sin embargo, no siempre resulta fácil darle un sabor rico sin recurrir al clásico consomé en polvo , que aunque práctico, suele tener exceso de sodio y aditivos.

Lo interesante es que los chefs profesionales tienen sus propios trucos para lograr un arroz sabroso, aromático y sin necesidad de usar este producto industrializado.

El truco está en el sofrito

La clave está en preparar un sofrito de base antes de añadir el arroz y el agua. Este paso consiste en sofreír en aceite o mantequilla ingredientes aromáticos como:

Cebolla finamente picada

Ajo triturado o machacado

Un toque de jitomate (en el caso del arroz rojo)

Pimient

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