La proliferación de llamadas telefónicas provenientes de números desconocidos — a menudo con prefijos extranjeros y que se cortan rápidamente— es una señal de alerta de dos modalidades de fraude cada vez más sofisticadas: el vishing y el wangiri.
Estas estafas buscan engañar a los usuarios para obtener información confidencial , generar costos elevados o perpetrar robos de identidad. Argentina es particularmente vulnerable a esto, registrando un 59% de llamadas no deseadas en el tercer trimestre del 2024, lo que la ubica en el segundo lugar de la región, según el Global Call Threat Report de Hiya.
Pablo García, BDM Cybersecurity Latam de Tivit, advirtió que en la actualidad la IA “potencia estos ataques , haciendo voces y guiones cada vez más convincentes”. Ante un promedio de