El Real Madrid había construido su fenomenal comienzo de campaña sobre un bloque sólido, sobre todo atrás. Pero todo eso se evaporó frente a un Atlético mucho más competitivo, que supo detectar las debilidades del rival y explotarlas sin piedad. Desde el planteamiento de Simeone , con la sorprendente inclusión de Sorloth como titular, hasta la insistente táctica de buscar balones cruzados al área, el plan rojiblanco fue un éxito total. Cada centro era una amenaza, y los zagueros blancos, esta vez, no dieron la talla.
Errores del Real Madrid
Ni Huijsen ni Carreras estuvieron al nivel que exige un partido así. Superados en intensidad, lentos en las coberturas y sin capacidad de anticipación en los balones altos, fueron desbordados una y otra vez. Y eso, ante un Atlético desatad