### ¡Alerta Global! La Resistencia a Antibióticos Aumenta
La resistencia a los antibióticos se ha convertido en un grave problema a nivel mundial, afectando la salud humana, animal, la agricultura, la ganadería, el medio ambiente y la economía global. Según el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), cada año mueren aproximadamente 700.000 personas en el mundo debido a infecciones hospitalarias causadas por bacterias resistentes. En Europa, se estima que alrededor de 33.000 muertes son atribuibles a este problema, mientras que en España, más de 4.000 personas pierden la vida anualmente por infecciones de este tipo.
El impacto económico de la resistencia bacteriana es significativo, con un gasto sanitario adicional que asciende a 1.500 millones de euros. Las proyecciones del PRAN son alarmantes: si no se reduce el uso de antibióticos, se prevé que en 35 años las muertes por infecciones multirresistentes alcancen las 390.000 al año en Europa, de las cuales unas 40.000 serían en España. Además, la resistencia podría superar al cáncer como la principal causa de muerte.
La resistencia a los antibióticos se refiere a la capacidad de las bacterias para resistir la acción de uno o varios fármacos. Este fenómeno ocurre como una reacción natural de adaptación, lo que hace que las bacterias sean difíciles de tratar. La pérdida de eficacia de los antibióticos es tan rápida que, si no se toman medidas, Europa podría enfrentar una situación en la que infecciones bacterianas comunes, como la neumonía, sean intratables, tal como sucedía antes de la llegada de estos medicamentos.
Una de las principales causas de la resistencia es el uso inadecuado de antibióticos. Se estima que alrededor del 80% de las infecciones comunes en invierno son de origen vírico, y los antibióticos no son efectivos contra virus. Sin embargo, la automedicación sigue siendo una práctica común, lo que no solo no beneficia al paciente, sino que puede provocar efectos secundarios como diarrea o erupciones cutáneas.
A pesar de estos desafíos, el consumo de antibióticos en España ha disminuido en los últimos años. En el primer semestre de 2019, se registró una reducción del 5% en las recetas hospitalarias y del 20% en las prescripciones del Sistema Nacional de Salud y otros centros. Sin embargo, España sigue ocupando el quinto lugar en el consumo de antibióticos en la Unión Europea, superando la media europea.
Los antibióticos más comúnmente prescritos en el país son la amoxicilina/clavulánico, la amoxicilina y la azitromicina. Además, el uso veterinario de antibióticos también es un aspecto crucial, ya que afecta la salud humana y el medio ambiente. En 2019, las ventas de antibióticos veterinarios en España se redujeron en un 13,6%, alineándose con la media europea.
Las autoridades sanitarias están implementando medidas para reducir el uso de antibióticos. Es fundamental que los pacientes no se automediquen y que un médico determine la necesidad de estos medicamentos. Los antibióticos no son eficaces contra resfriados o gripes y no deben ser utilizados como analgésicos. También es importante seguir las indicaciones del veterinario para el tratamiento de animales y completar cualquier tratamiento prescrito. La prevención sigue siendo la mejor estrategia, incluyendo el lavado frecuente de manos, una buena higiene alimentaria, evitar el contacto con personas enfermas y cumplir con el calendario de vacunación.