**¿Suicidio o asesinato? El enigma de Castro**

La muerte de José Miguel Castro Gutiérrez ha generado un intenso debate sobre si se trató de un suicidio o un asesinato. La discrepancia entre el informe policial y las conclusiones de los médicos legistas complica la situación legal de Susana Villarán. La Policía Nacional del Perú (PNP) reportó un corte de 14 centímetros en el cuello de Castro, mientras que los forenses del Instituto de Medicina Legal (IML) determinaron que la herida mide 27 centímetros. Esta diferencia es crucial, ya que podría definir la naturaleza de la muerte.

Castro fue encontrado sin vida en el baño de su casa el 29 de junio. La División de Investigación de Homicidios (DIVINHOM) sostiene que no hay evidencia de la participación de terceros en su muerte. En su informe, se indica que las heridas son compatibles con una autolesión, y que Castro enfrentaba una posible condena de 25 años de prisión, lo que podría haber influido en su decisión de quitarse la vida.

El alcalde Rafael López Aliaga ha insinuado que personas cercanas a Villarán podrían estar involucradas en un posible asesinato, afirmando que Castro era un testigo clave en un juicio relacionado con la entrega de sobornos por parte de Odebrecht y OAS. Sin embargo, la policía ha desmentido estas afirmaciones, indicando que no se encontraron signos de violencia en la casa ni evidencia de un ingreso forzado.

El informe de la DIVINHOM también señala que las manchas de sangre en el baño son consistentes con un intento de mantenerse en pie por parte de Castro, descartando la teoría de que su cuerpo fue movido por otros. Además, se menciona que Castro atravesaba una crisis emocional aguda, lo que podría haber precipitado su suicidio.

La viuda de Castro ha añadido más suspicacias al caso, mencionando a López Aliaga como uno de "los enemigos que querían hacerle daño". Esta declaración ha alimentado aún más las especulaciones sobre un posible asesinato. Sin embargo, la falta de pruebas concretas y la discrepancia en las mediciones de la herida continúan generando confusión en torno a la verdadera causa de la muerte de Castro.

Mientras tanto, el caso de los 15 policías involucrados en la banda del Monstruo sigue en espera, en medio de un clima de incertidumbre y especulación sobre la muerte de Castro y su posible conexión con el caso de Villarán.