El entrenamiento es uno de los pilares fundamentales para envejecer de manera saludable. Mantenerse activo en la adultez mayor no solo ayuda a preservar la fuerza muscular y el equilibrio, también es clave para prevenir enfermedades crónicas y mantener la independencia funcional.
En este contexto, investigadores han puesto el foco en un tipo de entrenamiento particular: los ejercicios con saltos. Aunque pueda sonar sorprendente, se trata de una práctica sencilla que, bien aplicada, puede mejorar la densidad ósea, un factor determinante para prevenir la osteoporosis y las fracturas. Así, los saltos aparecen como un aliado inesperado pero efectivo para la salud ósea en personas mayores. Saltar la soga
Involucrar saltos al entrenamiento puede ser efectivo para los músculos y la movil